atardecer en el Waraira Repano

atardecer en el Waraira Repano
atardecer en el Waraira Repano, Julio 2010

domingo, 8 de abril de 2012

Resurrección y Poesía


Día hermoso este Domingo de Resurrección, 8 de abril de 2012, día en que no hay sermones, ni silbidos, ni letras que puedan definir con exactitud lo que la contemplación alcanza. Hoy tan sólo un agradecimiento. Una alabanza. Bienaventurados los que son capaces de trascender la contemplación, los que pueden percibir la hermosa sintonía del estar vivos. Vivir no es sencillo, precisamente porque hay quienes no reconocen la trascendencia de lo cotidiano. Tiempo de regocijo, tiempo sagrado. El tiempo es quien pule la joya que somos. Mirar no es contemplar, contemplar es orar. La poesía es más que un contemplar y un describir. La poesía no es ni sonrisa ni tristeza, ni lágrima ni compasión, ni estallido ni silencio. La poesía es la poesía. El poema es el contenido, pero la poesía es la forma, la poesía es la vasija, el poema es lo que ella contiene. Domingo de Resurrección, domingo de poesía. El poema no es un sendero, la poesía tampoco lo es, la poesía traduce nuestros pasos sin necesidad de que ella misma avance. Poesía es resurrección permanente, es Adviento, Pascua y Cuaresma, nunca fusil, ni combate, es esperanza, es soledad y compañía. Poesía dialéctica, esa es mi poesía. Día eterno, día de resurrección, todos los días son poesía. Y tú eres mi poesía, mi resurrección permanente. En ti me encuentro y me fugo. La poesía no es una palabra ni una frase, es cuerpo y meditación. Sol del desierto, luna de la ciudad. Fiera. Estrella. Sendero. Druida. Sanedrín. Profeta. Ninguna palabra, ninguna estrategia. La poesía es inasible como la misma resurrección. La poesía no es resurrección. Ni día ni noche. Tan sólo es poesía. No pretende alcanzarte ni soñarte, tan sólo ser poesía.

Benjamín Martínez
1:29pm